Mi inicio en este reto. Descubrí Inktober creo que en 2013 o 2014, pero me pilló tarde para empezarlo porque quería hacer el mes completo, así que en 2015 me puse la alarma y lo hice. Como una puta mierda, pero lo hice.
Dibujos hechos en una libreta de calidad asquerosa, con un papel malísimo que se arrugaba al menor contacto con la tinta y que además se resecaba muchísimo y acababa con una textura de pergamino terrible. Decidí algunos de los dibujos con los seguidores de mi difunta página de Facebook. Yo publicaba mi entrada diaria y a la primera persona en adivinar de qué era (o alguna pregunta chorra que se me ocurriera) le mandaba un mensaje privado y me decía de qué le gustaría que fuera el siguiente.
El resultado fue bastante lamentable, pero al menos me sirvió para empezar a tomarme Inktober en serio y para que me picara todavía más el gusanillo.