Adiós, Mario.

No sabía ni dónde, ni cómo hacerlo, pero será aquí. En alguna parte me tenía que despedir de Mario. Hace años, ya no recuerdo ni cuántos (¿5, 6, 7?) se cruzó en mi camino virtual alguien llamado Mario. Una persona extremadamente tímida, pero al mismo tiempo muy explosiva y espontánea, con una calidad humana y